En ocasión del lanzamiento de la sección de la mapoteca de este sitio dedicada al voto preferente en las elecciones al Senado del año 2014, hemos querido observar a modo de síntesis algunos patrones de repartición del voto para este tipo de elección[1].
Para esto, se han utilizado dos criterios para comparar los candidatos electos al Senado en 2014 por voto preferente (lo que excluye los candidatos de Centro Democrático que se presentaban en lista cerrada): la ubicación del apoyo electoral en sectores rurales, o en las zonas urbanas por una parte, y por otra parte, el carácter más o menos concentrado del voto en términos geográficos[2].
De esta manera podemos destacar en la gráfica que se presenta a continuación y cruza estas dos variables tres grandes perfiles con casos llamativos de candidatos de todos los partidos que lograron representación en el senado.
Así, encontramos en primer lugar, el tradicional perfil del “cacique”, el senador con voto concentrado y preferentemente rural. La conservadora Myriam Paredes, que tiene el voto más concentrado de la muestra es un buen ejemplo, o el liberal Guillermo García Realpe, ambos con el voto concentrado en Nariño. Podemos citar también en esta categoría Maritza Martínez (del partido de la U) con una versión un poco más urbana, en el Meta. Es interesante notar que a nivel de partido, la U tiene la mayor proporción de sus senadores en esta categoría (además, de la ya citada Maritza Martínez, encontramos con este perfil congresistas como Manuel Guillermo Mora en Norte de Santander, Sandra Villadiego en Sucre, José Alferdo Gnecco en Cesar y La Guajira, o Martin Emilio Morales en Córdoba. Sin embargo, encontramos también aquí a Jorge Prieto, de Casanare, una clara excepción en la Alianza Verde que se define más por el perfil que presentamos a continuación.
Así al otro extremo, encontramos las “figuras nacionales” con un voto urbano disperso entre los principales centros urbanos del país. Claudia López, con el voto más urbano de la muestra, puede ser una de las más representativas aunque su voto se concentra mucho en Bogotá. Los votos de sus copartidarios de la Alianza Verde Jorge Ospina y Antonio Navarro se reparten de manera más equilibrada entre centros urbanos. Vale la pena destacar también en esta categoría las figuras más sobresalientes del Polo Democrático Alternativo como Jorge Enrique Robledo, Iván Cepeda, y Alexander López. Finalmente, corresponden a este caso algunas figuras de los partidos tradicionales como Viviane Morales y Juan Manuel Galán para el Partido Liberal, Armando Benedetti, Roy Barreras y Jimmy Chamorro para la U, y Carlos Fernando Galán y Carlos Fernando Motoa para Cambio Radical.
Al lado de esos casos, podemos encontrar también un tercer perfil menos evidente: senadores con voto predominante rural pero dispersos, lo que los aleja del perfil del cacique. Encontramos ahí a los dos senadores electos por la circunscripción indígena: Luis Evelis Andrade y Marco Aníbal Avirama, también los liberales Lidio Alberto García y Mario Alberto Fernández, los de Opción Ciudadana Julio Guerra y Antonio José Correa, los de Cambio Radical Antonio Guerra de la Espriella y el conservador Hernán Andrade. Llama la atención la fuerte presencia de senadores de la Costa Caribe en esta categoría (con la excepción de los indígenas, del santandereano Bernabé Celis, y del huilense Hernán Andrade). La existencia de esta categoría sugiere que en muchos casos, las redes políticas de la costa caribe no se limitan a un departamento y se extienden a toda la región.
Se confirma a manera de conclusión, que la política regional y local rinde un mayor fruto que intentar o arriesgarse a obtener votación en la totalidad del territorio nacional para el Senado, ya que este último escenario no es factor determinante para el éxito en las urnas salvo en pocos casos. Sin embargo, esto no significa que los senadores representen necesariamente un solo departamento. En la costa Caribe en particular, muchos senadores obtienen voto en varios departamentos de la región.
Más aun, no hay que olvidar la existencia de senadores con perfiles verdaderamente nacionales, y generalmente urbanos, predominante en los partidos de oposición (Alianza Verde y Polo Democrático), más aislados en la coalición gubernamental. Se trata en general de personalidades sobresaliente por su visibilidad mediática, por lo cual la predominancia del modelo del cacique regional no nos debería llevar a despreciar los efectos de la circunscripción nacional.
[1] Pueden consultar en la sección mapoteca de este sitio el mapa del voto preferente de cada senador electo en 2014, con los datos básicos que se retoman acá.
[2] Técnicamente, estas dos variables se miden por el porcentaje de voto obtenido en ciudades de más de 200.000 electores para la primera, y por el coeficiente de Moran de rango 1 para la segunda, se trata de un coeficiente que mide hasta qué punto el voto de un candidato se concentra en municipios geográficamente vecinos.